Fundación Rett lideró capacitación para el proyecto Sunflower en el Aeropuerto de Quito

El Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre de Quito dio un paso importante hacia la inclusión al implementar el programa internacional Hidden Disabilities Sunflower. La iniciativa busca facilitar la experiencia de viaje de personas con discapacidades no visibles —como autismo, epilepsia, fibromialgia, diabetes, entre otras— mediante un distintivo que señala al personal aeroportuario la necesidad de un trato adaptado.
El collar de girasol funciona como una señal discreta: los pasajeros que lo requieran pueden solicitarlo de forma gratuita y voluntaria en los mostradores de información. Su uso permite que el personal del aeropuerto ofrezca explicaciones más claras, acompañamiento adicional o tiempo extra durante los procedimientos. Aunque este distintivo no exime de cumplir con todos los procesos y controles, sí facilita una atención más consciente y adaptada a las necesidades de cada pasajero. La consigna para el personal es simple y poderosa: “¿En qué puedo ayudarte?”
Capacitación y cultura inclusiva
La implementación del programa fue posible gracias a la colaboración de Corporación Quiport, Fundación Rett, la Empresa Pública Metropolitana de Servicios Aeroportuarios (EPMSA) y Umuntu. Como parte del proceso, se realizó un recorrido de accesibilidad junto a personas con distintos tipos de discapacidad, evaluando señalética, infraestructura y atención. Además, se integró la experiencia previa de EPMSA en protocolos de atención a personas con autismo en los controles de seguridad.
Más de 900 colaboradores de 15 empresas que operan en el aeropuerto recibieron formación especializada, dirigida por expertos internacionales y por personas con discapacidades no visibles, quienes compartieron testimonios y recomendaciones prácticas. Esta preparación se complementó con capacitación en lengua de señas, fortaleciendo una cultura institucional sensible y preparada para atender a pasajeros con distintas necesidades.
Un programa con alcance global
El programa Hidden Disabilities Sunflower comenzó en 2016 en el Aeropuerto de Gatwick, en Reino Unido, y actualmente está presente en más de 350 aeropuertos de 70 países. La iniciativa ha demostrado que un pequeño distintivo puede transformar la experiencia de viaje de quienes tienen discapacidades no visibles, reduciendo barreras de comunicación y ofreciendo un trato más empático en entornos complejos. Su impacto ha trascendido a otros espacios, como centros comerciales y estadios, evidenciando su efectividad en distintos contextos.
Isabel Maldonado, directora ejecutiva de Fundación Rett, destacó: “Desde Fundación Rett, tuvimos la oportunidad de acompañar a Quiport en este proceso, que demuestra cómo las empresas pueden liderar transformaciones reales hacia la inclusión. La participación de las personas con discapacidad en todos los espacios es clave para garantizar sus derechos. Aplaudimos y felicitamos esta iniciativa, que marca un paso importante hacia una atención más consciente, empática y accesible”.